El público del Liceu dedicó un sonoro e incuestionable abucheo la noche de este lunes a Katharina Wagner, la escenógrafa alemana bisnieta del compositor Richard Wagner tras el episodio de la semana pasada en el que se negó a participar en la presentación de la ópera Lohengrin y fotografiarse con el resto del elenco. Los espectadores acogieron cálidamente el estreno de la nueva producción aplaudiendo uno tras otro a todos los intérpretes y, en el momento del saludo final, cuando apareció Wagner sobre el escenario la pitaron durante unos segundos de forma elocuente hasta que llegaron los aplausos y bajó precipitadamente el telón.Más informaciónEl Liceu ha tenido que hacer equilibrios con este Lohengrin, que se ha reprogramado esta temporada tras haber sido suspendido de forma súbita en 2020 al estallar la pandemia. Este estreno mundial se ha visto envuelto en la polémica por el conflicto entre Wagner y la soprano sueca Iréne Theorin, enfrentadas desde que hace dos años esta dedicó una peineta al público del Festival de Bayreuth, dirigido por la alemana, al recibir abucheos tras cantar El crepúsculo de los Dioses. El incidente comportó que Wagner rechazara trabajar con Theorin e impuso al Liceu que buscara una solución para el día del estreno.La dirección artística del teatro optó por fichar para una única función a la soprano finlandesa Miina-Liisa Värelä y que las otras cinco sesiones las asumiera la sueca, una de las sopranos más queridas por el teatro. Tras más de cuatro horas de función, los espectadores premiaron particularmente a la finlandesa, que asumió el rol de Ortrud, además de a Klaus Florian Vogt (Lohengrin), Elisabeth Teige (Elsa), y al director de orquesta Josep Pons, el penúltimo a subir al escenario antes de la aparición de Katherina Wagner, que ha ideado un Lohengrin transgresor en el que le da la vuelta a la trama concebida por su bisabuelo y en el que cobra un protagonismo un cisne articulado de color negro.

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